Hemos escuchado muchas veces que los caladeros de pesca se están agotando debido a la sobreexplotación de las especies. También se dice mucho que las piscifactorías podrían solucionar este problema. Ahora bien: ¿las piscifactorías son la solución a la sobrepesca?
LAS PISCIFACTORÍAS: ¿LA SOLUCIÓN A LA SOBREPESCA?
En términos generales, el estado de las poblaciones de peces salvajes no ha mejorado. En 2013, el 58,1% de las poblaciones pesqueras eran plenamente explotadas, el 10,5% eran infraexplotadas y el 31,4% eran sujetas a pesca excesiva (FAO, 2016). Por lo tanto, el 30% de las poblaciones sufría sobrepesca.
Ésto se debe al consumo cada vez mayor de pescado. Según un informe publicado por la FAO, en 2014 cada persona comía de media unos 20 kg de pescado, el doble que en 1960.
Por otro lado, desde la década de 1980, las capturas salvajes se han mantenido estables. Sin embargo, el suministro de pescado para consumo humano ha aumentado considerablemente. Así pues, si ha aumentado el consumo y la pesca se ha mantenido estable, ¿de dónde sale el resto del pescado?
La explicación a este hecho está en la acuicultura: en 2014, la producción de la pesca de captura fue de 93,4 millones de toneladas, mientras que la procedente de acuicultura ascendió a 73,8 millones de toneladas. En otras palabras, el 44% del pescado procedió de la acuicultura.

Viendo este panorama, no parece descabellado pensar que las piscifactorías podrían solucionar el problema de la sobrepesca.
¿POR QUÉ LAS PISCIFACTORÍAS PODRÍAN SER LA SOLUCIÓN A LA SOBREPESCA?
Según el informe Perspectivas de la población mundial de la ONU, en el año 2050, la población mundial habrá ascendido hasta los 9.700 millones de personas.
Ante estas cifras, podemos pensar que el incremento del consumo de pescado va a crecer muy por encima de la capacidad de producción de los océanos y mares. La acuicultura, pues, podría dar respuesta a este incremento en la demanda de pescado para el consumo humano, con el fin de satisfacer las necesidades proteicas.
Por lo tanto, las poblaciones salvajes no estarán sujetas a una presión mayor a la que ya están sujetas ahora.
Otra ventaja de las piscifactorías es que la producción es constante porque se tiene más control sobre ellas, es decir, se producen pocas fluctuaciones a lo largo del año. Eso no es así en las poblaciones salvajes, ya sea debido a su ciclo biológico o a que están sobreexplotadas.
Finalmente, las piscifactorías podrían reducir el impacto ambiental causado por la pesca: no habría capturas accidentales de especies que no son de interés, no se degradarían los fondos marinos por la pesca de arrastre… ¿Quieres conocer el impacto de la pesca en los ecosistemas marinos?
Si quieres saber en más detalle qué es la acuicultura y otros beneficios, te recomiendo mirar este vídeo de la Junta Nacional Asesora de Cultivos Marinos, del MAGRAMA (España):
A pesar de todas estas ventajas, las piscifactorías no sólo no son una solución, sino que incrementan el problema de la sobrepesca y acarrean otros muchos problemas.
¿POR QUÉ LA ACUICULTURA NO ES UNA SOLUCIÓN A LA SOBREEXPLOTACIÓN?
La mitad de las especies cultivadas (incluye tanto animales como algas) en la acuicultura no requieren un aporte de alimento exterior, debido a que se alimentan por filtración. De todos modos, es cierto que esto no es así para las especies carnívoras.
Sin ir más lejos, según la FAO (2016), en 2014 se destinaron 21 millones de toneladas de pescado a productos no alimentarios, de los cuales tres cuartas partes fueron para producir harina o aceite de pescado, el principal componente de los piensos para alimentar a las especies carnívoras de las piscifactorías.

En otras palabras, para alimentar al pescado de las piscifactorías se tienen que pescar animales salvajes, lo que agrava el problema de la sobrepesca. Según FAADA, se necesitan entre 3 y 5 toneladas de pescado salvaje para alimentar una tonelada de pescado de granja.
OTROS PROBLEMAS DEL CULTIVO DE PESCADO
Ya hemos visto que la acuicultura necesita capturar pescado salvaje para poder alimentar a las especies sujetas a cultivo. Ahora vamos a ver otros problemas para los propios animales y el medio ambiente.
Debido a que las jaulas están instaladas en puntos fijos, en las aguas circundantes y en el fondo marino se produce una acumulación importante de nutrientes y productos químicos procedentes de las heces y los restos de comida. Ésto puede causar un florecimiento de algas, las cuales agotan el oxígeno y, según la especie, pueden causar la producción de sustancias tóxicas.
De todos modos, en algunos casos se han implementado algunas medidas: como cambiar la posición de las jaulas cada año o situarlas en zonas de corrientes fuertes.
El uso de antibióticos y vacunas es frecuente para prevenir o tratar las enfermedades ya que el estrés sufrido los hace más susceptibles. De hecho, en las jaulas se produce una mortalidad que ronda entre el 10 y el 30%.

Otro problema importante es que muchas veces se usan peces modificados genéticamente. Si por accidente o por efecto de los depredadores, estos organismos escapan y se aparean con sus semejantes salvajes, puede producirse un cambio importante en la composición genética de las especies (contaminación genética). De hecho, entre 1992 y 1996, cada año se escaparon unos 1,3 millones de salmones de las granjas de Noruega. Otro efecto de los escapes es la transmisión de enfermedades y parásitos a los salvajes.
Otro inconveniente de las piscifactorías es que muchas veces se cultivan especies no nativas, es decir, se utilizan especies que no pertenecen a la zona en la que son enjaulados. Su fuga puede implicar la competencia por los recursos (tanto comida como hábitat) con las especies autóctonas. Ya vimos que las especies exóticas son un problema para la biodiversidad.
Como hemos dicho, los depredadores pueden ser un problema para las empresas dedicadas al cultivo de peces. La solución ante esta amenaza es su control o matanza, afectando así a sus poblaciones.
Si quieres ampliar la información acerca del impacto de las piscifactorías, te recomiendo leer este artículo de FAADA.
CONCLUSIÓN
Hemos visto que las piscifactorías tienen una serie de ventajas para solucionar el problema de la sobrepesca. De todos modos, el hecho de alimentar al pescado con animales salvajes incrementa aún más el problema de la sobreexplotación de los caladeros pesqueros; además de los otros problemas existentes.
¿Y tú qué opinas: son mayores las ventajas de las piscifactorías o sus inconvenientes? Deja tu opinión en los comentarios de este artículo.
REFERENCIAS
- FAADA: Piscifactorías
- FAO (2016). El estado mundial de la pesca y la acuicultura 2016. Contribución a la seguridad alimentaria y la nutrición para todos. Roma. 224 pp.
- Overharvest of Fish Population / Aquaculture Industry: Benefits and risks of aquaculture
- Salem State University: Benefits of aquaculture
- TalkingFish.org: All about aquaculture, environmental risks and benefits
- Foto de portada: Asc1733 (Creative Commons).